Mira qué interesante la idea del arquitecto americano John Locke, que decidió tomar el lugar de las antiguas cabinas de teléfono en Nueva York, en desuso en la cara de millones de teléfonos móviles y los convierten en pequeñas bibliotecas. La propuesta es parte de un proyecto de los asuntos que el ministro de Locke en el curso de arquitectura en la Universidad de Columbia y se encuentra bajo examen y aplicación.
Las habitaciones eran pequeñas islas con estantes de madera llenas de libros donados por amigos y vecinos de Locke, que cree que esto es una excelente manera de aprovechar este espacio urbano tan llena de nostalgia. Los estados arquitecto que los usuarios del sistema heridos otros valores en un constante intercambio de libros de diferentes áreas y preferencias. Es decir, la persona entra, coge un libro y volver al otro - y el título en sí mismo puede volver a la plataforma después de la lectura urbana.
Por supuesto, este es el proyecto ideal, que hasta ahora se ha desplegado en dos cabinas de la ciudad norteamericana. En el primero, en una calle más alejada, no hay libros o instrucciones marcadas, las muestras fueron los primeros en desaparecer, y después de dos semanas, hasta que las estanterías se han adoptado. En el segundo, bien ubicado, cerca de la intersección de una salida del metro, marcados con los libros, la interacción era genial, con las personas que toman las copias y otros que se adjunta. Después de seis semanas, los estantes y los libros fueron retirados y ahora esperan una nueva intervención, que también proporcionará directrices sobre cómo utilizar.
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